Cómo se manifiesta el problema?

La acidez de estómago es una sensación de ardor y/o quemazón en la parte inferior del pecho, ­debajo o detrás del esternón­ que, en ocasiones se difunde hasta el cuello o la garganta y puede llegar acompañada de un sabor agrio.

Cuando parte del contenido del estómago vuelve a subir hacia el esófago, se origina el fenómeno de reflujo gastroesofágico, el cual se produce normalmente después de las comidas de manera fisiológica sin causar molestias. Sin embargo, cuando el ácido del estómago fluye con frecuencia hacia el esófago y, se produce una irritación del revestimiento del esófago, es cuando hablamos de enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es una afección más grave y duradera en la que, con el tiempo, el reflujo gastroesofágico causa síntomas repetidos o complicaciones.

Cualquier persona puede desarrollar la enfermedad por reflujo gastroesofágico. Es más probable que una persona desarrolle la enfermedad por reflujo gastroesofágico si tiene sobrepeso o es obesa, en el caso de las mujeres que están embarazadas, por la toma de ciertos medicamentos y/o si la persona fuma o está expuesta regularmente al humo siendo fumador/a pasivo/a. Si se deja sin tratar, la enfermedad por reflujo gastroesofágico puede, con el tiempo, causar complicaciones graves, como esofagitis, estenosis esofágica y esófago de Barrett, así como complicaciones fuera del esófago.

La dispepsia se caracteriza por una sensación persistente de dolor de estómago, o sensación de acidez en el pecho o en la boca o de saciedad precoz, acompañada de una digestión lenta y difícil. Son muy comunes en la población, y suelen estar relacionadas con malos hábitos alimenticios, comidas copiosas y/o rápidas, o situaciones que llevan a comer más.

El dolor de estómago puede producirse como consecuencia del abuso de alcohol o del tabaco, o también por el uso de determinados medicamentos:

•Medicamentos antiinflamatorios denominados AINEs (como ibuprofeno, naproxeno, etc.)

•Corticoides

•Bifosfonatos (para tratar problemas óseos)

•Sales de hierro y de potasio

•Teofilina y derivados (antiasmáticos)

•Antagonistas del calcio y betabloqueantes (para problemas del corazón o hipertensión)

¿Cómo se puede tratar el dolor de estómago?

Cuando el dolor de estómago y sus síntomas son intensos y persistentes y, reaparecen tras la toma de un antiácido, es posible que el origen sea una gastritis o una úlcera, cuyas causas pueden ser las siguientes: infección bacteriana por Helicobacter pylori (80% de los casos) o abuso de fármacos antiinflamatorios (AINEs).

Las formas graves de gastritis y de úlcera, que en general pueden confirmarse por medio de gastroscopia y un examen histológico, requieren un tratamiento farmacológico intenso con empleo de dos o tres antibióticos para combatir la infección por Helicobacter pylori (casi siempre presente) o bien de medicamentos que bloqueen la secreción de ácido gástrico (inhibidores de la bomba de protones). Para las formas comunes de dolor de estómago esporádico o de carácter leve, a menudo es suficiente seguir hábitos saludables y hacer un buen uso de productos, como algunos naturales, que protegen la mucosa interna del estómago y complementan la capacidad protectora natural de la mucosidad gástrica

La mucosa gástrica es capaz de defenderse frente al ácido que está presente en el estómago en condiciones normales gracias al moco gástrico. Algunas sustancias naturales son capaces de proteger la mucosa del estómago y el esófago y contrarrestar la acidez, integrando la capacidad protectora natural de las mucosas del esófago y el estómago y así reforzar las defensas de estos órganos.

Si el problema se presenta de forma persistente es recomendable consultar al médico para que profundice sobre el problema y así obtener un diagnóstico adecuado.